Fecha

martes, 23 de diciembre de 2014

Cerro del Cabezo (Sierra de Andújar)

Panorámica del valle del Jándula. Ayo. del Membrillar en primer término

El Parque Natural de la Sierra de Andújar con 73.000 hectáreas, es el segundo espacio protegido mas vasto de la provincia de Jaén, tras el de Cazorla, Segura y Las Villas. En el corazón de Sierra Morena, este enclave natural cuenta con un extraordinario valor faunístico y cinegético y, por supuesto, paisajístico.


Magnífico ejemplar de (Pinus pinea)
Comenzamos la ruta en el área recreativa (en adelante AR) del Encinarejo, junto al río Jándula. Nada mas cruzar el puente sobre dicho río en dirección al Santuario de la V. de la Cabeza, nos desviamos a la derecha y estacionamos en las inmediaciones.
El primer tramo hasta la presa del embalse del Encinarejo, transitamos paralelos al río, por un camino en perfecto estado amplio y casi sin pendiente. Árboles de ribera, sobre todo, fresnos (Fraxinus angustifolia) y pinos piñoneros (Pinus pinea), nos acompañan en nuestro caminar.
Cerro del Cabezo desde la ctra.
Inicio. Puente entre brumas
Río Jándula, con algo de bruma
A.R. El Encinarejo
El camino es una autopista, plácidamente vamos transitando mientras se despereza el día, levantando la bruma por la acción del Dios Sol.
Pasamos por los observatorios de Doña Rosa y Los Lastrones junto al río, donde observar avifauna es una actividad relajante, perturbado de vez en cuando por el aleteo asustadizo de algunos patos y alguna garza real que nos indican su presencia. 
Garza real (Ardea cinerea)
La familia
El santuario de la V. de la Cabeza
El camino es una autopista
Desde el camino alcanzamos a ver entre el bosque mediterráneo el Santuario dela Vírgen de la Cabeza, al que perderemos de vista hasta dentro de un buen rato.
Nos desviamos del camino para acercarnos a los puestos de observación de la fauna alada, primero al de Doña Rosa, fotos de rigor y seguimos.
Observatorio Doña Rosa
Observatorio Doña Rosa
Un poco mas adelante llegamos al  observatorio de Los Lastrones, emplazado sobre unas rocas en la orilla del río, no tardamos en alejarnos (no queremos perturbar a unos aficionados) del lugar.
Observatorio de Los Lastrones
Los Lastrones
Unos minutos después llegamos al puente junto a la presa del Encinarejo. Llevamos recorridos 2'5 kms., aquí se produce un despiste (a medias), puesto que en la ruta que descargué no venía recogida ninguna indicación de puerta para seguir la ruta, por lo que deduje que debía seguir el camino, mas adelante lo aclaro.
Puente junto a la presa
Río Jándula desde el puente
Presa del Encinarejo
Rumbo a seguir
Seguimos el camino, ya que observo una alambrada a mi izquierda donde reza "Coto privado de caza" e intuyo que es finca particular y no hay puerta, tampoco iba siguiendo el track a pies juntillas, seguimos el camino hasta llegar al embalse, dándome cuenta entonces de la desviación con respecto al track GPS, así que media vuelta y volviendo por el camino es cuando nos percatamos de la puerta en la alambrada, que por cierto luego me dí cuenta que había salido en la foto de abajo, a mis espaldas. Fallo de los que antes que yo hicieron la ruta y no lo advirtieron, algo que yo si hago en la ruta que publico en Wikiloc con un waypoint que marca la presencia de la puerta.
A mi espalda, la puerta, y no la vimos
Embalse del Encinarejo
Puerta
Bolos graníticos
Encontrada la puerta, seguimos por el track que marca el GPS, este despiste no hubiese ocurrido si en las rutas publicadas en wikilos, hubiesen marcado un waypoint, sencillo.
Bolos graníticos
Atravesamos la puerta y comienza el primer repecho importante, un camino de cabras que coincide con la Cañada Real de Extremadura, luego se suaviza un poco. Pasamos por una formación rocosa llamada Bolos graníticos.
Pequeño arroyo hasta la puerta
Puerta junto a ctra.
Puerta junto a ctra.
A.R. el Jabalí
Transitamos junto a un pequeño arroyo de agua cristalina, pinos piñoneros de repoblación, lentiscos (Pistacia lentiscus), encinas (Quercus ilex sp. rotundifolia), romeros, cantuesos, y resto del arsenal florístico mediterráneo, nos acompañan por este tramo hasta una puerta junto a la carretera. La atravesamos y transitamos junto a la carretera por fuera de la alambrada. 600 metros después, llegamos al área recreativa de El Jabalí.
Después de echar un bocado y tomar un poco el sol, nos encaminamos hasta el santuario que ya lo tenemos a la vista. El sendero es un continuo sube y baja pero, dominando la subida.
Pasamos por unas pasarelas de madera y cruzamos una pista, pasamos junto a una construcción en piedra que en el waypoint lo señalo como "dolmen" por identificarlo de alguna manera.
Tras algo más de 10 kms. desde que comenzamos, llegamos al cerro del Cabezo, lugar de peregrinaje de miles de personas, creyentes o no.
La romería de la Virgen de la Cabeza es la mas antigua de las que se celebran en España. Tiene también otra historia referente a la Guerra Civil, pero esa es otra historia.
Sin entrar en otro tipo de disquisiciones, he de reconocer que el entorno merece la pena girarle una visita, mas que nada por la componente histórico-artístico del conjunto.
Las vistas desde el santuario abarcan la mayor parte del parque natural, desde el cerro Burcio del Pino (1290 m.s.n.m.), máxima altitud del parque -limítrofe con la provincia de Ciudad Real- y, el valle del Guadalquivir unos 240 m.s.n.m..
Al menos tuvimos suerte y no había muchos turistas en el cerro, por lo que disfrutamos del momento, un rato de descanso mientras comemos el bocadillo al solecito y a continuar.
Por la carretera en dirección al Hoyo de Mestanza, unos 200 mts. y giramos a la izquierda, pasamos junto a la casa hermanda de Marmolejo y enlazamos con la Cañada Real de Extremadura.
Burcio del Pino (1.290 mts.)
Casa hermandad de Marmolejo
Los Berruecos
Camino amplio y ligeramente descendente. 1 km. después pasamos a la altura de otra formación rocosa a nuestra derecha, Los Berruecos, y un poco después dejamos la cañada real y giramos a la izquierda por el Camino Viejo de los Romeros, aquí la pendiente se vuelve mas pronunciada.
Umbría de los Ruiseñores

Un rato después llegamos al mirador del Camino Viejo, habiendo pasado previamente por la Umbría de los Ruiseñores. Este camino, es el que suelen utilizar los romeros para ascender al cerro del Cabezo desde Lugar Nuevo -hacia donde nos dirijimos-, descenso o ascenso, según se mire, bastante pronunciado.
Mirador
Mirto (Mirtus communis)
Camino de bajada jalonado de esparragueras de piedra, antes unas fotos panorámicas del valle del Jándula, cerros de Marquitos, Píngano, Pedernales y El Rayo.


Mirador del Camino Viejo
Resbaladizo descenso por el Camino Viejo que nos lleva hasta el arroyo del Membrillar, donde el terreno se suaviza y forma una llanura. Cruzamos el arroyo por una pasarela de madera, el camino se vuelve a ensanchar y llegamos a la pista principal donde giramos a la izquierda.
Ayo. del Membrillar
Ayo. del Membrillar
Río Jándula
Área recreativa La Recta.
Un kilómetro de suave paseo junto a pinos piñoneros de gran porte, llegamos al área recreativa La Recta. 
Hago un inciso para señalar el buen estado de todas las áreas que hemos visitado, la limpieza el buen estado del mobiliario e instalaciones, algunos ayuntamientos tendrían que aprender.
NOTA IMPORTANTE: Después de parar un rato junto al río, continuamos la marcha en busca de la carretera, pero, antes de llegar a la misma, desde un vehículo al parecer particular, me requiere un individuo con una chaqueta donde pude leer "Tragsa", por nuestra presencia por el camino. 
Mi sorpresa fue mayúscula cuando me informa que necesito solicitar autorización para practicar senderismo, ante mi desconocimiento, le contesto que en ningún parque de la provincia me han requerido autorización así como que no sabía tal circunstancia.
Le pregunto que si para venir de barbacoa también lo necesito y me contesta que no, le hago una apreciación sobre tan ridícula cuestión cuando es mas peligroso venir de barbacoa que de senderismo y se encoge de hombros. Según me comenta, este control es por el tema de la búsqueda de cuernas.
En fin, el cazurreo marca los tiempos y las formas. Parte de la culpa es nuestra, de los senderistas que no creamos un lobby de presión al igual que los cazadores.

CROQUIS: