Este año tuve la fortuna de al ir paseando por Sierra Morena descubrir el nido de una calzada. Sentí un poco de miedo de que algún desalmado lo descubriera al igual que yo.
Afortunadamente, unas semanas después pude ver los pollos (dos) haciendo sus primeras acrobacias aéreas con su progenitores.
Es una alegría ver estos (y otros) animales en completa libertad y ocupando el nicho ecológico que les corresponde.
Ojalá el destino les provea una larga y fructífera existencia y que vuelvan a su lugar de nacimiento en años venideros para el disfrute de todos, y yo que los pueda seguir fotografiando.
Que suerte poder disfrutar de este nido de una águila calzada y poder observar su crecimiento. Este año está siendo un buen año para observar aves en diferentes lugares, se nota que han podido crecer en la tranquilidad.
Lo descubrí bien entrado el verano, ya los pollos casi volantones, así que un par de semanas después ya volaron del nido aunque no abandonaban la zona. He echado de menos este año las culebreras que otros años andaban por la zona. Gracias por tus comentarios Guillem.
¡Hola Ángel!
ResponderEliminarQue suerte poder disfrutar de este nido de una águila calzada y poder observar su crecimiento. Este año está siendo un buen año para observar aves en diferentes lugares, se nota que han podido crecer en la tranquilidad.
¡Salud y montaña!
Lo descubrí bien entrado el verano, ya los pollos casi volantones, así que un par de semanas después ya volaron del nido aunque no abandonaban la zona.
EliminarHe echado de menos este año las culebreras que otros años andaban por la zona.
Gracias por tus comentarios Guillem.
Que fotos más bonitas!
ResponderEliminarGracias David, aunque lo bonito es el animal en sí.
EliminarUn saludo.