Calatañazor

Calatañazor

A Calatañazor lo envuelve la leyenda, la mística de una batalla que no está claro que sucediese, o que si sucedió, no parece estar sustentada con pruebas fehacientes (todo esto según expertos en la materia).

No obstante, seguiremos creyendo en la leyenda que cuenta que "en Calatañazor, Almanzor perdió el tambor", o lo que es lo mismo, su imbatibilidad.
 

Sobre un promontorio rocoso se localiza esta pequeña pero afamada villa de Calatañazor, sita en la provincia de Soria.

50 vecinos habitan este pequeño pero interesante a la par que famoso pueblo, cuyo dicho todos conocemos.

Perteneciente a la comarca de Tierras del Burgo, Calatañazor se encuentra a orillas del río Milanos. 

Entramado de callejuelas en las que lucen orgullosas antiguas casas de piedra y madera que le imprimen ese toque medieval, como si el tiempo se hubiera detenido haces 500 años.

A los lejos, en la silueta de la villa, destaca su Castillo, que aunque se encuentra en ruinas y desvencijado por el paso de los años y de las vicisitudes, se muestra todavía altivo. 

Panorámica desde la Torre del Homenaje

Flanqueado al sur por el río Milanos y hacia el norte por la llanura que nos acercará a su famoso sabinar.

Atardecer bellísimo en estas llanuras sorianas desde tan emblemático e histórico lugar, donde vuela la imaginación.

Dejamos atrás el atardecer mientras contemplamos la robusta iglesia de Nuestra Señora del Castillo.
 

Desde la Ermita de La Soledad, me despido para otra ocasión en la que acercar la geografía española a estas páginas.

Nota: Esta entrada tiene correspondencia con La Fuentona, ya que ambas se encuentran en la misma ruta y se hicieron el mismo día.