Ruta cortita (7'3 kms.) para conocer el nacimiento del gran río gallego, el Miño.
Para ello nos trasladamos a la localidad lucense de Meira. Dejamos el coche junto al parque Profesor Rio Barxa.
Caminamos los primeros 300 metros junto al cauce del todavía incipiente Miño. Callejeando, pasamos junto a la Colegiata de Santa María, un templo católico de estilo cisterciense que data del siglo XII.
Llegamos hasta un panel indicador del Pedregal de Irimia. Continuamos por la carretera LU-P-3003 durante unos 3 kms.. Recordad que siempre hay que circular por la izquierda en vía interurbana carente de arcén, simple cuestión de seguridad.
En la cuneta abundan las Dedaleras (Digitalis purpurea), una bonita flor veraniega.
Nos detenemos un momento en el Aula de la Naturaleza (Aula do Natureza) donde vemos algunos ejemplares de abedules (Betula pendula) y roble albar o carballo (Quercus Robur).
El último kilómetro tiene una fuerte pendiente hasta llegar al Pedregal de Irimia (650 mts. de altitud aprox.), lugar oficial del nacimiento del río Miño.
Bajo el pedregal se escucha el murmullo del agua, una pequeña corriente que llegará a ser el río mas caudaloso de Galicia y que desembocará en el Oceano Atlántico en Tui (Pontevedra) tras recorrer 315 kilómetros.
En los prados colindantes a la carreterra, encontramos la (Linaria triornithophora) y la espectacular orquídea (Dactylorhiza elata).
De vuelta a Meira, rodeamos la Colegiata de Santa María y el Monasterio homónimo .
La Casa Consistorial es un espectacular edificio de piedra junto a la Colegiata de Santa María. No quise hacer fotos de la portada, pues se celebraba una carrera de coches ese día y ¿donde estaban estacionados?, ¡exactamente!, en los aledaños del conjunto monumental, como si no hubiera mas sitios.
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| Monasterio |
Terminamos la ruta en el Parque Profesor Rio Barxa, un lugar encantador por cierto que alberga un área recreativa.
Una cosa, la ruta propiamente dicha no es un dechado de encanto, circular por la carretera no es la mejor manera de visitar este tipo de accidentes geográficos, pero es lo que hay.
C R O Q U I S
P E R F I L
Hola Ángel.
ResponderEliminarUna pena, que un río de su importancia, no tenga un acceso más natural. Como todo gran río, su nacimiento apenas comienza con un pequeño caudal, el entorno, magnífico.
Salud y montaña.
El tema es que el nacimiento se encuentra a escasos metros de una carretera asfaltada, en la que además ese día había una carrera de coches y estaba todo lleno de neumáticos y balizas.
EliminarNo creo que costase mucho trazar un sendero como alternativa a la carretera. ¡En fin!
Saludos Eduardo.